Para empezar, este tratamiento ancestral chino, no es ancestral, y probablemente ni siquiera es chino. De los documentos más tempranos, el del estudioso de la cultura china Paul Unschuld propone que la idea podría haberse originado en la Grecia Hipocrática y haber sido importada a China más tarde. Definitivamente lo que no tiene son 3.000 años de antigüedad. La referencia más temprana al uso de agujas es del año 90 de nuestra era, pero hablan de sangrados con grandes agujas o incluso lanzas. La tecnología para fabricar diminutas agujas de acero como las apropiadas para la acupuntura no ha existido hasta hace unos 400 años.
El primer occidental en escribir sobre la acupuntura, Wilhelm ten Rhijn, en 1680, no la describe como la conocemos hoy. No menciona puntos específicos o qi, habla de grandes agujas que se clavan en el cráneo y son dejadas actuar durante 30 respiraciones. La acupuntura se ha venido utilizando y dejando de utilizar en Europa desde entonces. En América se utilizó en 1826 como un posible medio de resucitar a víctimas de ahogos. No funcionó y «fue abandonada con disgusto».
El gobierno chino intentó prohibir la acupuntura varias veces entre 1822 y la segunda guerra mundial, durante el gobierno nacionalista chino. Mao la recuperó como parte de su campaña del «médico descalzo» en los años sesenta como una forma barata de aplicar la medicina a las masas. Pero nunca la probó él mismo porque no creía que funcionase. Fue el gobierno de Mao el que acuñó el término «medicina tradicional china».
Coincidiendo con el incremento de su popularidad en Occidente, dejó de utilizarse en el este. En 1995, médicos americanos conocieron que hoy en día sólo del 15% al 20% de los chinos eligen su «medicina tradicional», y que suele utilizarse junto con tratamientos occidentales bajo diagnóstico de médicos que han obtenido su título en Occidente. Parece que la mayor parte de los pacientes que eligen la «medicina tradicional» lo hacen por ser la única que pueden pagarse. A pesar de tener un gobierno Comunista, en China no hay cobertura sanitaria universal.
La acupuntura funciona de la misma forma que el resto de los placebos. Se ha demostrado que alivian el dolor, la nausea y otros síntomas subjetivos, pero no que alteren el curso natural de cualquier enfermedad. Los estudios han mostrado que la acupuntura libera endorfinas, un aliviante natural del dolor. Los veterinarios afirman que montar a caballo o lanzarle un palo a un perro para que lo recoja también liberan endorfinas. Probablemente golpearte el pulgar con un martillo también libera endorfinas. Y es un inesperado pero excelente remedio contra el dolor de cabeza.
Los médicos tienen demasiadas explicaciones para la aparente respuesta a la acupuntura. Distrae la atención de los síntomas originales hacia el hecho de estar siendo agujereado. Expectación, sugestión, consenso de pares, complicidad, error de causalidad, condicionamiento clásico, condicionamiento recíproco, condicionamiento operante, refuerzo, consenso en grupo, inversión económica y emocional, desafección social y política, beneficio social para la creencia, curso variable de la enfermedad, regresión al promedio, etc. Hay muchas formas en las que la psicología humana puede engañar sobre la efectividad de un tratamiento inefectivo. Luego está el hecho de que no todos los placebos son iguales. Tumbarse, relajarse y pasar el rato con tu amado con seguridad tendrá un efecto placebo mejor que una píldora de azúcar.
En una investigación de George Ulett, se averiguó que aplicando una corriente eléctrica sobre la piel en la muñeca, una forma de estimulación eléctrica nerviosa transcutánea, se consiguió el mismo efecto que aplicando una aguja, y un punto de la muñeca funcionó para síntomas en cualquier parte del cuerpo.
Considerando lo inconsistente de los resultados de las investigaciones y la improbabilidad de la existencia de cosas como los qi y los meridianos, aparte de la gran cantidad de preguntas pendientes de respuesta, es razonable concluir que la acupuntura no es otra cosa que un elaboradísimo y sospechoso placebo. Puedes hacer vudú con seres humanos si te divierte, e incluso conseguir de ellos una respuesta placebo. Pero no hay evidencia alguna de que vayas a conseguir nada más.
Graxias: La media hostia
2 Dudas, opiniones o reclamos:
Muy buena y educativa tu entrada.
Ahora otra cosa. Yo no considero a China como un verdadero comunismo (en realidad no considero que ningún país haya sido comunista durante demasiado tiempo). Allí el comunismo es para los miembros del partido. El resto son casi escoria social.
Gracias por la acotación Moisés, la verdad es que el artículo lo tomé del blog al que hago referencia. Siempre me han disgustado esas grandes estafas que con el tiempo se fortalecen y adquieren adeptos, como la astrología que no por ser tan antigua sea veraz.
Saludos.
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